miércoles, 28 de abril de 2010

El pensamiento negativo

Miedo. Incomprensión. Odio. Rabia. Entre lágrimas escribía palabras sueltas que expresaban como se sentía. Nadie lo podría comprender pero tampoco pondría de su parte para que los demás lo hicieran. Como siempre lloraría y cuando no quedaran más lagrimas esbozaría una sonrisa inocente. Sabía que eso no era la felicidad pero estaba dispuesta a sacrificarla. Algún día las cosas cambiarían y entonces nadie sería capaz de conseguir que derramara una lágrima. Un mundo de sonrisas, besos y caricias. Un sueño de idiotas ¿verdad? Pero era el suyo. Cogió la hoja y arrancó aquello que había escrito. En su mundo ya no había hueco para esas palabras.

Una realidad que no solo me hace daño sino que me hace sentir fuerte. Aunque a veces no sea consciente, soy capaz de cualquier cosa.

lunes, 26 de abril de 2010

Puedes contar conmigo

Últimamente es muy fácil hacerme feliz. Esta vez el encargado de hacerlo ha sido un simple comentario. No ha sido especial por sus palabras sino por aquello que demostraba. Tras pensar muchas veces en ello había llegado a la conclusión de que nuestra amistad no llevaba a ningún lado. Durante los últimos meses hemos estado más tiempo distanciadas que compartiendo buenos momentos. Parece mentira que seamos capaces de dar más importancia a las pequeñas tonterías que a todos las alegrías que hemos vivido desde que somos amigas. Llega un momento en el que es mejor quedarse con aquello que nos ha hecho sonreír y desechar todo lo demás. No puedo evitar recordar cuando todas las mañanas subíamos juntas las escaleras del colegio. Yo siempre con una sonrisa en la boca y tú extrañada de que pudiera estar tan feliz de buena mañana. Siempre te decía que no había ningún motivo en especial y puede que te engañara porque si lo había. Era fácil sonreír cuando sabias que por muy aburrido que pudiera a llegar a ser el día siempre habría unos minutos que compartir no solo contigo sino con todas las demás. Creo que nunca fuisteis conscientes de lo importantes que erais, porque hubo un momento que lo fuisteis, y con esto no digo que no lo seáis pero está claro que las cosas han cambiado. Como dice la canción: Ya no seré lo que fui para ti una vez pero puedes contar conmigo. Aprendí a sufrir, aprendí a reírme de mí, me reconstruí, tuve que decir que sí, que sí.. Aprendí a sentir, también a pasarlo bien sin ti, y me levante cada vez que me caí.

domingo, 25 de abril de 2010

Felicidad en estado puro

Felicidad en estado puro, brutal, natural, volcánico, que gozada, era lo mejor del mundo... Mejor que el sexo, que un 69, que una orgía, una paja, el sexo tántrico, el kamasutra, las bolas chinas... Mejor que la nocilla y los batidos de plátano... Mejor que la trilogía de George Lucas, que la serie completa de los Teleñecos, que el fin del Milenium... Mejor que los andares de Ally Mcbeal, Marilyn, la Pitufina, Lara Croft, Naomi Campbell y el lunar de Cindy Crawford... Mejor que el pequeño paso de Amstrong sobre la Luna, el Space Mountain, Papa Noel, la fortuna de Bill Gates, las malas experiencias cercanas a la muerte, la resurrección de Lázaro, todos los chutes de testosterona de Schwarzenegger, el colágenos de los labios de Pamela Anderson, mejor que los excesos de Morrinson... Mejor que la libertad... Mejor que la vida.

Es así como sentí cuando mis dedos habían terminado de escribir todo aquello que guardaba en mi interior desde hace tantos meses. Si me hubieran hecho un análisis emocional en ese momento hubieran encontrado un alto porcentaje de inseguridad, nerviosismo y pánico pero también unas pinceladas de felicidad. Necesitaba superar aquel miedo que me tenía paralizada para avanzar y me sentí pletórica una vez lo había conseguido. No hay nada como vencer aquello que te hace débil, ya que, de alguna manera cuando lo haces adquieres una gran fortaleza.

miércoles, 21 de abril de 2010

En un cuarto casi rosa

Realmente no sé como comenzar. He intentado tantas veces encontrar las palabras adecuadas. Quizás el problema es que nunca las encontraré. Siempre habrá algo en medio que me paralice. Por eso he decidido sacar valor y comenzar a escribir. Quiero que sepas que confío en ti a pesar de que puedas pensar lo contrario. Nunca he sabido cómo abordar esta situación pero me hubiera gustado contarte esto mucho antes. Es difícil de comprender cuando no estás en la circunstancia, y cuando lo estas, lo es todavía más. No quiero que ni por un momento dudes que no solo eres una de mis mejores amigas sino una de las que más me importa. Porque los amigos son como las gafas te cansan y con el tiempo se rayan pero por suerte a veces uno encuentra gafas que molan. He tenido un miedo atroz durante este tiempo. Sí, miedo.. no puede haber nada más patético que tener miedo a mostrarse tal y como eres. No me avergüenzo de ser como soy e incluso me siento orgullosa. El único problema es el miedo a defraudar: a que me mires de diferente manera, a que me trates como si fuera otra persona o, mejor dicho, a no ser lo suficiente. Porque pasé lo que pase yo siempre voy a ser esa persona que conoces desde que tienes memoria, aquella con la que aprendiste que los amigos se podían contar con los dedos de una mano, aquella que siempre ha estado ahí..

Ahora solo quiero que cierres los ojos y escuches esta canción. Quizás puedas comprender un poco más como me siento.


http://www.youtube.com/watch?v=aVVP4wJhXtM

martes, 20 de abril de 2010

Sumergida en mundos ajenos

— ¿Se conocían de antes?
—De toda la vida. Desde antes de que nacieran. Quien es tu verdadero amor está destinado para ti de toda la vida. Aunque lo conozcas tarde —hizo especial énfasis en la palabra «tarde»—, porque... ¿Qué quiere decir tarde? Tarde es lo que uno considera tarde. ¿No crees? —Aurora asintió; no quería hablar para que no se le atragantaran los recuerdos—. Fíjate, ahora es tarde para la mañana, son casi las dos; pero es temprano para la noche. Luego, nunca es tarde. Funciona de acuerdo a tus necesidades.
—¿Sabes por qué, queriéndose tanto, se... —le costaba decirlo— suicidaron?
—No lo sé. Tal vez para que ni la vida volviera a separarlos.



Había perdido la cuenta de cuánto tiempo llevaba pasando páginas de aquel libro que acababa de comenzar. Siempre le había gustado leer pero últimamente se había convertido en una necesidad. Le fascinaba sumergirse en mundos imaginarios con personajes irreales que estaban fuera de su alcance. Soñaba que algún día podría escribir su propia novela en la que plasmaría retazos de su vida. Sabía que era demasiado ingenua y realmente se conformaba con poco. Le bastaba con poder conseguir su sueño y estaba dispuesta a pagar cualquier precio. Desde hacia aproximadamente un año temía que se quedara en una simple ilusión pero aun así había decidido seguir intentándolo ante la mirada de algunas personas que pensaban que había perdido el norte. Y sinceramente a ella no le importaba lo más mínimo, ya que, estaba acostumbrada a que la tomaran como una loca y juzgaran cada uno de sus pasos. Con este último libro se estaba quedando realmente prendida y por este motivo no podía dejar de leer. Se trataba de una historia de amor de las que han desaparecido, es decir, aquello que anhelaba y deseaba en lo más hondo de su corazón. Pensaba que si algún día conseguía amar tanto a una persona de tal forma que fuera correspondido con el mismo amor sería suficiente para siempre. No necesitaba demasiado pero cada persona que aparecía en su currículum amoroso siempre fallaba en algún aspecto. Ahora estaba volviendo a sentir la llama del amor pero prefería permanecer en silencio, guardar los sentimientos en su interior, total.. es más fácil vivir pensando que tienes una oportunidad porque si te rechazan ya no queda nada. Admiraba a esos dos personajes, y soñaba con que algún día alguien admirara a aquellos que ella misma crearía basándose en su historia.

domingo, 18 de abril de 2010

Fantasia o realidad

Me gustaría poder encontrarte cada noche en mis sueños, ya que, es el único momento en el que de verdad puedo sentirte cerca. Una noche más cierro los ojos y repito tu nombre mentalmente con la esperanza de que esta vez consiga soñar contigo. La mayoría de veces no da resultado pero cuando ocurre duplicaría las horas de sueño para tardar más tiempo en despertar. Me transporto a un mundo de fantasía en el que sigues tan preciosa como siempre. Te conviertes en la destinataria de todas mis miradas, besos y caricias. Acurrucada entre tus brazos el tiempo se detiene y solo puedo pensar en lo feliz que estoy de tenerte a mi lado. Necesito que este momento no acabe aunque soy consciente que lo hará y todo desaparecerá de golpe. El final está cerca siento como nuestras manos se separan, rozo tus labios sabiendo que tardaré en volver a sentirlos y te susurro un te amo. Yo que pensaba que no sería capaz de volver a amar y sin embargo cuando estás cerca mi corazón pierde el control. Ojala siempre sucediera como aquella noche en la que estuve a tu lado y lo primero que vi al abrir mis ojos fue tu inmensa sonrisa. Desde entonces solo quiero que deje de ser un sueño y se convierta en mi realidad.